‘Si no hay meditación, entonces eres como un ciego en un mundo de gran belleza, luz y color ’
– Jiddu Krishnamurti –
Si nunca has meditado y quisieras tener una idea de lo que se trata, te recomiendo empezar por un método que sea lo más sencillo posible, preferiblemente que no siga ninguna corriente filosófica específica. La meditación en sí no es algo complejo, pero existen tantos métodos como dedos apuntando a la luna, lo cual puede resultar desalentador para quien quiera adentrarse en la práctica por primera vez.
Por ello he creado una serie de pasos básicos y sencillos para que puedas comenzar:
Realiza alguna actividad física previa. Hacer Asanas de Yoga, salir a trotar o hacer sentadillas puede ser una buena opción.
- Siéntate cómodamente manteniendo la espalda recta para permitir una respiración diafragmática en su máximo potencial. Coloca las manos sobre los muslos, entrelaza los dedos o pon una sobre la otra, como te sea más cómodo.
- Cierra los ojos e imagina un círculo de luz blanca que te rodea y te protege.
- Haz 5 respiraciones a un ritmo natural y trata simplemente de visualizar cómo entra y sale el aire. Si te es posible, haz 5 respiraciones controlando los tiempos de la respiración, por ejemplo, en una relación 4:4, 4 segundos de inhalación y 4 de exhalación, dejando una breve pausa entre ellos.
- Visualiza la relajación de cada parte de tu cuerpo. Puedes empezar por los pies, pasando por los órganos, la cara, la coronilla, etc.
- Observa que pensamientos te alejan de ese momento presente, déjalos fluir sin hacer resistencia. Una técnica puede ser imaginar que tienes un estacionamiento de autos vacío al lado. Cada vez que surja un pensamiento lo vas aparcando en los puestos libres. Enfócate nuevamente en tu respiración. Para este momento ya deberías estar con el cuerpo relajado y con menos actividad mental.
- Puedes aprovechar este momento para hacer la visualización que desees. Puedes incluir una oración, alguna afirmación o simplemente agradecer.
- Simplemente SÉ en el momento presente. Obsérvate internamente y al mismo tiempo mantén la atención en lo que te rodea. La brisa, los sonidos, los olores, etc., pero como si fueras un espectador, sin poner juicio, simplemente contempla la existencia. Quédate el tiempo que consideres cómodo para ti, sin forzar.
- Si no quieres visualizar puedes ir directamente a un objeto de concentración: la respiración, un mantra, un mandala, un símbolo, un santo, la llama de una vela o algún chakra. La idea es irse fundiendo poco a poco con él.
- Abre los ojos y empieza a moverte despacio, empezando por las manos y los pies. Frota tus manos, llévalas a tus ojos y luego a tu coronilla en profundo agradecimiento por la existencia.
Luego puedes ir profundizando en el método con el que sientas más afinidad. Puedes utilizar cualquier aplicativo que te mida el tiempo y te ponga música si así lo deseas, yo uso uno que se llama Insight Timer. En YouTube también hay montones de meditaciones guiadas para principiantes. Empieza solo con 5 minutos y ve progresando como lo vayas sintiendo. Puedes seguir hasta el paso 5 al principio y luego ir añadiendo los siguientes a medida que vayas dominando mejor la práctica. Tratar de quedarte quieto una hora si nunca lo has hecho puede pasar a ser una tortura. Con la práctica irás queriendo poder tener más tiempo para hacerlo. ¡Para mí cuando suena la campana que indica que se terminó la sesión es peor que cuando suena el despertador por la mañana!